lunes, julio 31, 2006

El destino de mi mitad

"Por mucho que yo cambie, mi destino no cambia.
Cualquier figura puede inscribirse en el interior de un círculo."
M. Yourcenar.

Leo a Yourcenar diciéndome todas estas palabras amargas, y no sé cómo pedirle que me explique cuánto de verdad tienen y cuánto de esa nostalgia que nos arrebata el corazón al ser incomprendidos. Ya alguien me sacó la ilusión de que sí hay una figura que no puede inscribirse dentro de un círculo, cuando yo creía maravillosa esta afirmación. Entonces debo remitirme a la anterior, a la que me da miedo pronunciar pero sé que Debe ser pronunciada.
«Por mucho que yo cambie mi destino no cambia.»

Siento el peso de esas letras en mi espalda. No importa cuantas vueltas haya dado desde aquel entonces, sigo siendo la misma, sigo cargando el estigma de quien fui, de quien ya no quiero ser. Entonces veo repetirse ante mis ojos las mismas escenas, las mismas palabras dichas hacia y desde mí; intento escapar de este sitio al que regresé, y no entiendo porqué si yo estaba ya tan lejos, tuve que caer de nuevo en esta muerte. Dime Marguerite, porqué no puedo yo cambiar ese destino incierto, que jugando al “deja vu” me hace sentir lo mismo repetidas veces.
¿Por qué no podré yo cambiar esa esencia meltífica? ¿Qué debo hacer para que desaparezca el veneno de mí? ¿Qué debo ser?

Y ella sigue repitiéndome maléficamente que no podré salir de este círculo vicioso. Maldito sea el destino que me impide cambiar. El destino no existe.
¿O sí?

No has de existir, destino, porque yo lo decido. Ya no existis para mí. Sos un punto en el pasado, un punto hacia el que no miro más. Y aunque siga siendo la misma, ya no soy la que fui. Ahí no entrás destino: decido cuál mitad se muere y cuál mitad renace. Y ahí no tiene nada que ver mi destino errante, mi destino muerto; ahí soy yo la que decide, ahí soy yo la que cierra esa puerta con tal de que no pueda dar jamás un paso atrás.
Ya no soy lo que fui, y por esto mismo es que no soy más destino.

13 comentarios:

  1. El destino lo hacés vos, las barajas se te presentan en mazos que vos elegís, pero quien maneja las barajas sos vos.

    Y por mas que a veces los circulos parezcan encerrarnos en destinos enterrados, siempre se puede salir de allí y dar el salto, vos sabés como, no te lo voy a decir yo, que mas de una vez he quedado encerrada en uno de esos círculos, pero vos has dado muestras inmejorables de que sabés salir, asi que no mires para afuera, mirate vos que te vas a decir con claridad como salir.

    Un abrazo de esos.

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  2. Otra vez yo

    "Remontar un barrilete en esta tempestad sólo hará entender que ayer no es hoy, que hoy es hoy, y que no soy actor de lo que fui" Divididos

    solo para que veas que si tenés donde bucear dentro tuyo, esto lo tenías acá nomas...

    :)

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  3. Escogemos los caminos y equivocamos los destinos. Esa es la conclusión a la cual llego. Te dejo un beso enorme y gracias por tu visita en mi blog.

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  4. Hola!!
    Pensarse,sentirse y decidirse en un destino me parece buenisismo,siempre que seas vos quien lo ve,lo siente y sobre todo si lo elejis.
    Te dejo un beso.

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  5. Te cambio las palabras de Marguerite por unas autóctonas de Daniel Guebel. Eso sí, ni si te ocurra salir al balcón... buajjajajaj


    "Hay hombres que pasan por la vida buscando los rastros que sobre el mundo dejaría un deseo inútil: el deseo de que los actos respondan a una ley. Cuando por múltiples razones alcanzan a comprender que en el mundo esa ley no siempre es cumplida, tales hombres tienden a asignarle toda responsabilidad a un orden excesivo que llaman “destino”. Atados inexorablemente a las consecuencias, estos hombres no piensan nunca -no se atreven a pensar- que era la naturaleza de sus pretensiones lo que alentaba la falla; no comprenden nunca que era en ellos mismos donde habitaba la fatalidad."

    Besos y ataduras.

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  6. Pato:
    Todos nos hemos visto encerrados en destinos, pero a veces algo nos hace saltar: una tormenta, una persona, un redescubrimiento. Y ahi vemos claramente donde esta todo, y podemos salir de una vez por todas. Será hasta qye caigamos en otro destino, pero quizás éste nos guste más.

    Definitivamente, las palabras estaban en esta misma página
    =)

    besos!

    Juan de la Cruz:
    Escogemos los caminos y ellos nos van haciendo, nos van llevando hasta las encrucijadas. A veces también elegimos los destinos. Los elegimos porque sabemos lo que viene tras un camino, lo suponemos, lo prevemos, luego lo vivimos, y luego nos damos cuenta lo bien y lo mal que nos hizo..

    besos!

    mi otro yo:
    Hola! Pensandolo un poco, no me gustan los destinos. Son como caminos pautados, aunque los elijamos. El destino tiene un tanto de inflexibilidad y otro tanto de normalidad, de vida cotidiana, que nos cuesta tomar uno u otro costado.
    Elegir un destino es algo comun, algo que hacemos y asumimos. Sin embargo, esperar un destino, no querer cambiarlo es como dice Hesse en la columna de frases de la derecha. Quien espera su destino, se queda solitario y frío ante la vida, ya no queda mas nada que hacer y por lo que vivir.

    Por eso rechazo al destino. Porque si me llego a quedar un minuto más en él, no habra vida que valga la pena.

    Gracias por pasar!
    Besos!

    DudaDesnuda:
    Cuanta razón tiene Guebel!
    No voy a salir al balcón porque no tengo, jaja, pero si me asomo un poquito por la ventana quizás... jajaja

    Muchos llaman "destino" a sus propias elecciones, porque no saben asumirlas. Yo las asumo, y reconozco cuales corren por mi cuenta. Pero qué hago con aquello que no pude evitar? Era la naturaleza de mis pretensiones lo que alentaba la falla.(me estoy autocontestando jeje)
    Entonces mejor, si dejo atrás todo ese mundo conflictivo y paso a llamarlo pasado, ya no destino ni elecciones, sólo pasado y pisado.
    No cierto?

    Besos y liberaciones para todos

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  7. Muy cierto.

    Besos asumidos.

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  8. Ay, el destino, qué tema, qué tema. He destinado muchísimo tiempo pensando en eso. Tanto que, netamente tomado, quizás me haya ocupado años enteros. Y la verdad que creo en el destino cuando me conviene. Me resisto a ser preso de un determinismo por más libre que éste pudiera llegar a ser (por más libre y contradictorio a la vez). Sin embargo, creo que las cosas no son casuales, entonces...entonces me veo encerrado en un círculo del que ya no puedo salir. Y veo que ése ha de ser mi destino: el de encontrar una salida. A mi manera. Y a eso le llamo vida. Un beso.

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  9. Adriano:
    Siempre me encuentro encerrada en el mismo círculo de interrogantes que describís. Que si existe, que si no, que si soy libre, que si no. A veces defiendo tal o cual teoría según mi estado de ánimo, o el momento que esté viviendo, pero lo cierto es que nunca llego a una conclusión definitiva.
    El destino es todo un dilema...
    pero por esta vez, solo sé que dejo un posible destino relegado al pasado, por lo que no podrá concretarse y habrá sido una posibilidad que no fue.

    Un beso!

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  10. Entiendo la palabra destino como sinónimo de resignación...Es nacer en un lugar con unas circunstancias que determinan a priori lo que puedes llegar a ser, pero creo (o quiero creer) en la capacidad de improvisar, de cambiar mi jugada aunque sea con un farol, de arriesgar lo que aún no tengo (mi destino) para ganarle una mano a la vida (aunque sólo sea una)

    Lo que pasó nos condiciona, nos persigue, nos limita a veces, pero no nos encadena a un único papel.

    A veces aferrarse a la idea del destino, es sólo una estrategia tras la cual nos escondemos para no enfrentarnos a la tarea de buscar lo que realmente deseamos.
    Miedo al fracaso...resignación.

    Pero todo esto no son más que esperanzas, mis esperanzas y creo que las tuyas también...Es imposible saberlo, pero prefiero vivir la vida con esta ilusión porque esta sí es mi decisión.

    Besos, preciosa Aye.

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  11. ajá, ya me parecia..

    yo acá comente!...
    porque no aparecio el comentario?????????
    mnmmm

    lo que te decia es que....


    asi parece ser el mundo, como las ruinas circulares de borges, con los destinos escritos.
    pero uno al ser conciente de esta realidad comienza a actuar en concecuencia....
    vos sos el único fundamento,
    el único destino que tenés
    y que sos.

    suerte

    santi :D

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  12. Cascabel:
    Por eso mismo, el destino es al resignación, es elegir al pasado como brújula de toda tu vida, y contrariamente a lo que se dice, siempre cambiamos, y siempre existe la posibilidad de cambiar respecto a un montón de cosas.

    Así como vos, prefiero quedarme con mis ilusiones, inestables, pero mías y elegidas.

    Besos!

    Santiago:
    enserio comentaste antes y no apareció? Qué raro...éste por lo menos apareció =)


    a vos te parece que el mundo tenga ya tu destino escrito? Yo creo que hay cosas que nunca pudimos determinar, pero hay otras que podemos elegirlas al verlas, que podemos cambiarlas si así queremos hacerlo y precisamente como decís, uno es el propio fundamento por el cual cambiar; mi único destino es no ser siempre la misma, mi destino es cambiar de ruta cuando sea necesario.

    ahora me hiciste acordar que tendría que leer las ruinas circulares..

    besos!

    Ele:
    sería el destino el que hizo que pasaran esa canción justo cuando entrás acá? Yo diría casualidad.. jaja


    pero lo cierto es que exista o no el destino, nosotros construimos un camino desde que nacemos, con todo aquello que lo condiciona y luego lo seguimos hasta que nos damos cuenta que ya no nos satisface, que es hora de cambiarlo. Y ahí nos metemos en los senderos que nos desvían y nos conducen a otros caminos en los que decidiremos entrar o no. Y así vamos recorriendo nuestra vida, construyendola a cada momento.. porque la vida consiste precisamente en no dejarnos arrastrar por lo que decidan el tiempo y los años.

    Besos para Ele, y para todos.

    =)

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  13. esto da para una larga charla, no cierto Ele?
    Algún día se concretará =)
    Besos!

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