para que no reconozcas bajo las palabras
el mar infinito que te rodea en mi mente,
ese mar que no deja de mojarme los pies y las manos
con tu esencia de lejos.
He de escribir muchas palabras sucias
antes de poder decir aquellas
que te hagan un hueco en el pecho y entren como la lluvia,
Envolviéndonos a ambos en un océano que desconocemos.
Palabra líquidas que acercan...
ResponderBorrarBello, Aye.
Un beso!
Me hiciste recordar a alguien a quien le dirían tal cual tu primer párrafo.
ResponderBorrarSólo quisiera saber cómo hacer para no terminar sintiendo afín, también, ese último verso...
Hermoso Aye.