domingo, mayo 20, 2007

Letras que se escapan de las manos

"Ahora da igual seguir, parar, pasar de largo
Coleccionar retratos que viví
Emocional, sentida en un impacto
La vida es un extracto que perdí"

El cielo estaba encapotado. No gris, negro profundo; como el color de una amargura que se viene acumulando día tras día sin poder derramar una sola gota.
Estaba encerrada en casa, para variar, y al ver la oscuridad avasallante de las tres de la tarde no resistí las ganas de romper con alguna parte de ese bloque macizo que me envolvía totalmente. No importaba nada, tenía que salir, aún sin paraguas, ni siquiera con abrigo. Ya no importaba nada, excepto sacarse el tedio, la vejez de la quietud por muchos días, esa vaguedad misma que me estaba ennegreciendo.
En la calle ya todos se habían escondido en sus hogares, incluso los gatos vagabundos de la esquina: uno al lado del otro dormitaban bajo el cobijo seguro de los autos. Los árboles de otoño eran troncos con muñones que nunca serían ramas fuertes gracias a los jardineros impiadosos. Y pude sentir esos muñones secos como propios, como las ramas que dentro de mí no podían crecer (quizás por culpa de mi impiedad), aquellas que serían siempre iguales. Miré mis manos, demasiado blancas y heladas, y las sentí como muñones, como partes de mi cuerpo que ya no podrían sentirse manos más que en el recuerdo de haberlo sido. Manos como muñones inútiles que ya no pueden tocar a un alguien imaginario, porque ya no pueden escribir, ya no son la herramienta de mi alma; no las siento, tienen frío y miedo porque ya no sirven, están muertas, fuera de mí. Y yo las quiero vivas, oliendo a flores y dibujando signos en millones de hojas que guardaré sin motivo razonable.
Lloran mis manos doloridas y llora el cielo encapotado porque no quieren estas palabras anegadas, retenidas y confusas; quieren que lluevan e inunden, que corran como río, que vayan más lejos que yo, allá: a lo inalcanzable, a lo inimaginable. Con gemidos y llantos inaudibles, las nubes negras, las manos blancas y mi voz se van haciendo paso, se van desangrando con palabras que selecciono cuidadosamente y con el desdén característico del miedo a lo que puedan decir.
Por eso esa necesidad de empaparme en las calles vacías, por eso esa necesidad de gritar aunque nadie me escuche, por eso escribir palabras que nadie leerá, y luego un día, cansarme de todo y salir gritando por ahí, por aquí, convirtiendo mi voz en letras vivas, con entrañas y espíritu, letras más allá del tiempo, letras que hablen por mí.

"Días que brillan sobre el piso mojado
Me daré una vuelta para verte un rato
bajo la tormenta."
Quique González

12 comentarios:

  1. No son demasiadas letras y sin embargo, son tantas palabras las posibles... y son tantas frases las que seremos capaces de decir... Tantas son, que a veces pensamos en las que no llegaremos a construir. Y nos preguntamos cómo serían esas frases por decir.

    Es como la sensación de los días que se nos escapan de las manos, algo parecido. Soñamos con los días azules de reflejos dorados y sin embargo, también están los días grises, incluso negros. Y los necesitamos.

    Lo que pasa es que puede dar la sensación de que como los silencios en la música, todo tiene que ser. Y quizá todas esas letras que se escapan son necesarias para las que se guardan en las manos. Las que son seleccionadas cuidadosamente. Las que uno puede gritar por ahí. Esas letras que están más allá del tiempo.

    Me gustan mucho tus letras.

    Besos, Aye

    (y tu música)

    ResponderBorrar
  2. "Días que se escapan de las manos,
    huyen como coches robados"

    Ayer regresando de algun lado, venia escuchando esta canción y pensando en la rapidéz con la que huye todo lo que no podemos hacer, lo que no podemos decir, ni escribir, ni vivir, como si el vértigo se hubiera dueñado de los imposibles y todo pasara veloz a mi lado.

    Sin embargo lo que para vos son muñones, fijate, yo lo veo como un descanso.
    Un tiempo igual al que le toma a los árboles esperar la primavera para volver a brotar y dar de si lo que estos meses de aparente sociego irán acumulando.

    Debajo de esos árboles amputados corre savia, igual que en vos corre sangre.
    Esa savia dará hojitas verdes en unos meses.

    Tu sangre, te va a dar palabras, de hecho este relato es una muestra excelente de ello.

    Un abrazo y por siempre Quique :)

    ResponderBorrar
  3. Hermoso texto salido del alama de una soñadora enamorada!!

    ResponderBorrar
  4. Y un día volvió Aye. Has regresado con todo, je. Me encantan esos conceptos que se entrelazan a través de metáforas: cielo encapotado, manos que lloran, empaparse de ciudad.

    ¿Qué ha sido de tu experiencia en este mes que has pasado sin escribir? ¿No te ha sucedido que después de mucho tiempo, uno acumula enormes deseos por volver a manifestarse y termina explayándose de una manera tal que cree haber no escrito jamás un texto así?...

    Veo como un despertar poético en tus líneas. En serio, eh...Copado el regreso. Que los días no se te escapen. Y que la guitarra continúe sonando al lado tuyo.

    Un beso, Aye.

    ResponderBorrar
  5. A veces las palabras nos apresan, como una cárcel impuesta, aunque siempre encontramos la manera de conjugarlas hasta ver la luz.
    Un abrazo.

    ResponderBorrar
  6. Me gustó mucho tu blog, y me quedo con esta frase, "No puede ser que estemos aquí para no poder ser", te la agradezco...

    ResponderBorrar
  7. "No importaba nada, tenía que salir, aún sin paraguas, ni siquiera con abrigo."

    Conozco esa sensación, la de sentirse desnuda, en carne viva, porque todo llega y se siente... y querer salir a seguir sintiendo para aclarar las cosas... salir en la tormenta, mojarse y pensar con esa lluvia... hasta que amaine

    ResponderBorrar
  8. es un placer leer que te gusta el gran quique gonzalez querida, es un placer saber que puedes apreciar, no es comun al dia de hoy en el pais, el gran talento de este muchacho.
    me emociono de veras.
    fuiste a verlo el año pasado cuando todo en el chacarerean???
    realmente es solo para entendidos parece.
    un placer.
    lindo bloggomondongo.
    hernan.

    ResponderBorrar
  9. como gran ladron de frases que soy, o ladron de grandes frases(aun no lo defino),te regalo una para el repertorio.
    "es necesario que todo cambie un poco para que todo siga igual" dice lampedusa en il gatopardo
    y ya que estamos...
    "siempre espeor al dia siguiente" seneca.
    "los japoneses no miran, sospechan" mr. woody allen.

    ResponderBorrar
  10. muy bien contado lo de quique!!
    yo estuve las dos noches que se anunciaron, me entero por vos que habia una de prensa una semana antes;la verdad que estuvo barbaro todo, incluyendo el lugar, que conociamos por YOK, acogedor, ameno y eso.
    te cuento con gracia, y verguenza, que escribis que quique toco un poquito de paloma dando lugar al pedido de la "corriente..." y, jaja, era yo un par de porroncitos heineken despues al fondo de todo a la derecha de quique, el mismo que le grito a pablo que toque una de los caballeros, el mismo que le grito a quique, la segunda noche, "fumate un caño quique", no se si te acordas, pero estuvo bastante gracioso.
    la verdad que conoci a quique unos meses antes de esos conciertos porque camisetas lo promociono, y despues de varios temas empece a concluir en que ete pibe se las tiene y se las trae.
    con respecto al ascenso de quique por supuesto que pienso como vos, de hecho me he ocupado de regalar mas d euna copia de ajuste de cuentas en pos de dar a conocer.
    bueno, espremos que pronto lo vemaos y de veras me alegro de leer que lo escribis con emocion cuando lo escribis porque realmente me pasa que quique me emociona tambien.
    un saludote.
    hernan.

    ResponderBorrar
  11. Zooey:
    Me gusta esa conclusión que sacás de todo esto... Que las palabras se escapan como los días, y que de alguna forma eso tiene que suceder para que las palabras dichas valgan más. Te creo, y me contento un poco más con esto.

    Me alegra siempre que te gusten mis letras y mi música(Quiquíiiin!!) =)

    Besos!

    Pato:
    Muchísimas gracias por esas palabras... supiste darle la vuelta a mis propias palabras sin que me diera cuenta antes en ningún momento.
    Me dejas helada, contenta, emocionada.
    =)

    Un abrazo y otro gracias.

    Mi despertar:
    jaja, alma soñadora y enamorada de la vida y de las palabras!!
    =P
    Besos!

    Adriano:
    Jaja "Y un día volvió Aye."
    Sí Adrianito, sí tenía que ser, un día tenía que volver, no? Es una lástima que tenga que ser así, encima que si vuelvo sea con las palabras un poco amputadas. Pero creo que es mejor que nada. =)
    Creo que es tal cual como decís: después de tantos días de no haber escrito una sola palabra, las sentí agolparse desesperadas por salir y contar algo, aunque fuera solamente esa necesidad imperiosa, aunque nada más repitiera algo que mi mente me guitara hacía días...
    Me alegro que veas "un despertar poético" como decís, porque a veces, en la rutina de los días siento que voy perdiendo las palabras, que las dejo morir en el silencio. Pero quizás tengan ustedes razón y no sea así, sino que quizás se estén guardando para salir algún día en una forma mejor. =)

    Los días puede que se escapen, pero cada día que apsa la guitarra suena más (y mejor!!! =P)

    Besos!!

    Gregorio:
    Yo creo que sí, que las palabras no están para encerrarnos (aunque a veces lo hagan) sino más bien para darnos la libertad de usarlas a nuestro antojo...
    Otro abrazo!

    Melina:
    Bienvenida! Viste lo que es esa frase de Cortázar? Es Genial! Por eso está ahí primera, para alentarme siempre que no puede ser. Espero a vos te haya servido igual. =)
    Saludos!

    Cecilia:
    Es esa misma imagen, el quitarse todas las pieles para que por fin quede la voz, escribiéndose entre gotas de lluvia, que se lleven todo aquello que nos hace callar.
    =)
    Besos!!

    Hernan/Que no es poco x3:
    Bievenido!
    La verdad me sorprendiste con tantos comentarios! =)
    Te decía ya en tu blog que es un placer encontrar argentinos que escuche a Quique, porque no hay muchos! Y luego que me contás la anécdota del Chacarerean ¡estoy súper sorprendida! Me acuerdo de haberlos escuchado pidiendo Paloma (es más, hasta creo que me dí vuelta a ver quienes eran). Yo estaba sentada adelante de todo en la 2da o tercer mesa contando desde adelante, masomenos, así que mucho de la gente que había no pude ver. También recuerdo lo de los caballeros pero no estoy muy segura de acordarme lo del "caño"( habia uno con un vozarron tremendo que gritó varias veces pidiendo temas y diciendo cosas, serías vos????) =P

    No sé muy bien que es "Camisetas", pero realmente que suerte que lo pudiste conocer unos meses ante de que viniera y también tener la suerte de poder ir a verlo las dos veces, ambas estuvieron buenísimas...
    Yo conozco a Quique desde los comienzos, hará 7 años masomenos... desde el 99, que creo fue cuando sacó su primer disco. Conocidos en España nos lo hicieron llegar y fuimos escuchando cada disco de a poco. La historia es larga para contarla por acá, pero si andás con tiempo podés visitar la primer página que se hizo de Quique, a la cual intenté renovar un poco el año pasado (con mucho esfuerzo pero no tanto éxito =S).
    Con Quique se trata de eso, del boca en boca mas que nada, así vamos sumando más admiradores =) No sé cuando volverá a tocar por Buenos Aires, pero ojalá que cuando lo haga esté con disco nuevo porque se están necesitando nuevas canciones. =)

    Besos!!

    PD: De las frases que dejaste, me causó mucha gracia la de los japoneses! y la primera... no se porqué me suena un tanto triste... cambiar algo para que al fin y al cabo todo siga igual...

    Gracias por dejarlas!

    ResponderBorrar
  12. salir gritando, salir corriendo....bajo la lluvia, empapandose... si supieras como te entiendo.....

    ResponderBorrar

Quienes dejan brotar las palabras...